El fundador y presidente del Focep, ex constituyente, ex candidato presidencial y eterno líder de la izquierda peruana, cumple 80 años el lunes 19 de setiembre, pero el jueves 15 será homenajeado por su condición de legendario dirigente de izquierda. A propósito de ese reconocimiento, hicimos un repaso de su accidentada trayectoria política…
-Don Genaro, ¿valió la pena entrar a la política peruana?
-Claro, pero solo vale la pena si uno entra a la política motivado por ideales de mejorar el país, no para beneficiarse. ¡Cómo me gustaría ver a nuestro país grande y próspero, sin la enorme cantidad de pobres que hoy tiene…!
-En estos tiempos, cuando alguien habla de ideales, suele ser calificado de ingenuo, hasta de tonto…
-Soy un idealista, y si por serlo me califican de tonto, pues lo soy. En política prefiero ser idealista a ser de esos que entran solo a agarrar, a ‘morder’ para llenarse de plata. Si no, vea el caso concreto de Alan García… ¡cuánto de dinero tiene ese hombre ahora…!
-Su amigo Alan García…
-Sí, mi amigo personal, pero no le puedo aprobar como amigo que se haya llevado ingentes sumas del tesoro nacional, con diferentes nombres y motivos…
-A los apristas no les va a gustar esa declaración…
-Ellos también están disconformes con él. Recuerdo haber escuchado a la Sra. Cabanillas decir que el Apra había perdido por la corrupción en el gobierno de Alan García. Y ella es una dirigente notoria… Yo soy solo un amigo lejano de Alan García.
-A él tampoco le va a gustar leer esto…
-Más que no gustarle, dirá que es solo uno más de los que hablan mal de él…
-…Y él hasta podría decir que Ud. lo envidia…
-¿Quién puede envidiar a Alan García?
-Un político que habiendo sido candidato presidencial y no haber ganado, ve cómo él sí ha llegado dos veces al poder…
-El ha llegado dos veces al poder, pero con el apoyo y auxilio de la derecha. Por eso en la segunda vuelta del 2006, oí a un periodista televisivo que había que votar tapándose la nariz por Alan García. La derecha se ha ganado un dirigente hábil, él les ha servido bastante a ellos.
La izquierda, pasado y presente
-¿No habla usted por resentimiento, don Genaro?
-No. Porque si yo fui candidato presidencial en 1980 no fue para ‘morder’, fue para dar al Perú un giro social y económico, de transformaciones que le permitan a este país rico, grande e histórico convertirse en la gran patria de todos los peruanos.
-Han pasado 31 años desde que usted ofrecía a la población ese discurso, pero el mensaje sigue vigente porque no se ha podido conseguir esa transformación…
-Por eso sigo diciendo lo mismo. Con todos los ensayos políticos que se han hecho desde ese año, las cosas siguen iguales y hasta peores, porque hemos tenido ‘baguazos’ y masacres de comunidades campesinas.
-Si es así, ¿por qué la gente no vota por las propuestas de izquierda?
-Porque la derecha fue más efectista en su propaganda. Así la gente ha preferido las propuestas de la derecha.
-En parte, es responsabilidad de la izquierda, que nunca llegó cohesionada a una elección…
-Claro, es también porque había intereses internos en la izquierda, pues cada cual quería ser el máximo dirigente, el mejor líder. Estábamos al ‘gana gana’…
-Algo que muchos peruanos no perdonan a la izquierda y sus dirigentes…
-Es una discusión interna que malogra los grandes ideales de la izquierda, por eso estamos ante una izquierda que, lejos de haber avanzado o haberse fortalecido, está en cero balas… cero puntos.
-¿Eso da la razón a quienes dicen que la izquierda solo sabe oponerse, pero nunca estaría lista para gobernar?
-Eso de oponerse pasa solo cuando solo se es minoría, pero si la izquierda llegara a ser mayoría, entonces gobernará el país con mucha amplitud. Ojo que no todo era malo en la izquierda. También teníamos a dirigentes como Gustavo Mohme Llona, quien era muy convocante, y desde su aporte la izquierda empezó a ganarse respeto y a demostrar que no tiene el sectarismo que se nos achaca cuando se dice que la izquierda va a liquidar a los ricos, a los empresarios, a los exportadores… Gobernaríamos con todos.
-¿Qué siente, honestamente, que le faltó a la izquierda para consolidarse?
-El apoyo del resto. Uno de los opositores para lograr la unidad fue Javier Diez Canseco. El fue uno de los que atacó la alianza Izquierda Unida porque, según él, con ella la izquierda se había desnaturalizado, deslegitimado.
-¿Y usted qué cree?
-Que no es cierto. Nunca lo fue. No sé por qué capricho él se fue. El es así, caprichoso…
Sendero Luminoso, la falta de renovación
-¿Cuánto tuvo que ver Sendero Luminoso en el fracaso y el desprestigio de la izquierda?
-Muchísimo. Sendero aterrorizó al pueblo, y como sus integrantes se autodenominaban comunistas, nuestro mensaje, que de algún modo estaba vinculado al Partido Comunista que no era de Sendero, provocaba rechazo. Nadie quería saber nada con lo que sonara a comunismo. Por eso también la represión en el gobierno de Fujimori fue feroz.
-¿Le faltó a la izquierda un deslinde más fuerte?
-Claro, un deslinde categórico. La reacción de la izquierda ante los atentados era solo protestar o hacer un minuto de silencio. Debimos decir con más fuerza que Sendero era una alternativa mortal, con la que no teníamos nada que ver.
-¿Y por qué no lo hicieron?
-Porque se consideró que la izquierda debía ser convocante… Es verdad, también, que había temor. Sendero cumplía una labor liquidacionista en las comunidades, donde preguntaban por las autoridades y nuestros dirigentes y los mataban de forma cruel. Así actuaban… siempre sembraban el terror…
-Como sea, no pudieron convencer a todos los peruanos de que ustedes se diferenciaban de Sendero…
-Siempre lo hemos dicho, y hasta ahora condenamos a sendero. Nosotros somos una izquierda que por ideales políticos mariateguistas, e incluso algunos marxistas, queremos la transformación de este país para que la masa pobre, la mayoría de la población, ascienda u n nivel de fuerza gobernante.
-A propósito de eso. ¿Por qué la renovación nunca llegó a los partidos de izquierda?
-Es que la gente se acostumbraba teniendo a uno solo a la cabeza, y así el líder fue creciendo….
-Creciendo y envejeciendo…
-Sí, pero felizmente siempre hay sucesores políticos. Yo ya tentgo 80 años, pero en el Focep, que va a cumplir 50 en el 2013, ya tenemos jóvenes profesionales y universitarios.
La familia, el legado
-A los 80 años, ¿tiene algo de qué arrepentirse?
-No, pero sí debo reconocer que he hecho sufrir a mi familia por mis ideales. En 1962, por fundar el Focep, me enviaron al Sepa (he estado ahí tres veces. Soy el Decano del Sepa); y en los 70’, a El Frontón, el mismo Juan Velasco Alvarado. Además, en Argentina, junto a Hugo Blanco y otros 13 candidatos a la Asamblea Constituyente, estuvimos a punto de ser lanzados al mar por el presidente Videla en Argentina…
-¿Siente que debió dejar la política para no afectar a su familia?
-No. Ella es parte de mi trabajo, de mi vida política… es verdad que mi esposa e hijos pagaron las consecuencias, pero también sufrió y sobrevivió las prisiones y deportaciones. Eso me alentaba…
-¿Y de qué ha vivido usted, don Genaro?
-De abogado, cuando me dejaban trabajar… y de las circunstancias. Cuando Morales Bermúdez me deportó a Francia, Manuel Scorza, que ya estaba allá bien acomodado, me dio alojamiento y comida durante un año. Después, con las remuneraciones del Congreso. Esos han sido mis únicos ingresos…
-¿Y cuál cree que es su legado?
-Mi única herencia es una lección de vida: deben ser luchadores, honrados, dignos, trabajadores… y deben perseverar en lo que hacen, en sus ideales.
-¿Cree que la sociedad peruana ha sido ingrata con usted?
-No, porque cada uno hace su papel. A esta edad, ¿qué puedo pedir?
Posturas controversiales
-Si Ud. hubiera sido presidente, ¿qué medida sustancial hubiera aplicado?
-Atacar la pobreza. Empezando por el último estamento, que es el campesinado, que ya está para pedir limosna…
-¿Cree que hubiera podido conseguirlo?
-Desde luego. Si el pueblo veía que trabajaba en ese objetivo, y se conseguía de a pocos, empezaba a mejorar todo. Estoy seguro. La papa peruana es exquisita, y no habría problemas en venderla, para empezar, a Cuba, Venezuela y Europa.
-Ha mencionado dos países que provocan escozor ahora: Cuba y Venezuela…
-No. Cuba está en una etapa de dialogar con el mundo entero…
-¿Así? ¿Usted aún cree y defiende el régimen de Fidel castro?
-Naturalmente. El socialismo de Cuba no es sectario, es abierto al mundo…
-¿Aún con falta de libertades, don Genaro?
-Hay amplia libertad. Yo he estado en Cuba varias veces…
-Ud, pues… porque usted coincide con Fidel, pero los opositores no pueden decir lo mismo…
-¿Pero quién se va a oponer a Fidel sabiendo que está haciendo una obra grande…?
-Hay quien se opone, y tiene el derecho de hacerlo…
-Es una porción mínima la que le hace la contra…
-¿Piensa lo mismo de Hugo Chávez?
-El también es un gran presidente, por eso siempre es elegido y ratificado en votaciones… Hugo Chávez ha mejorado sustancialmente a la masa de pobres de Venezuela, y el 2014 estoy seguro de que será reelegido
-¿Sabe que, probablemente, por pensar así, usted y el Focep están cada vez más aislados políticamente, o son considerado de pensamiento obsoleto?
-Todo lo contrario, el nuestro es un pensamiento moderno. Queremos desarrollar el país no solo a nivel de la élite, sino también en los más pobres.
-¿Y por qué ese mensaje no prende en la ciudadanía en las elecciones?
-Sí, prende, pero el gran capital actúa para que el campesinado y los obreros se queden donde están…
-Evidentemente, a ustedes les ha afectado la desideologización…
-Eso viene de la época de Fujimori, porque consideró que dejando d e enseñar las teorías del marxismo a los universitarios iba a borrar del mapa a Sendero Luminoso. No sabían que Sendero iba por otro lado, era una especie de secta terrorista…
-¿El gobierno actual de Ollanta Humala es un gobierno de izquierda?
-En la segunda vuelta Humala dijo que sería un presidente de centro-izquierda. Si el mismo dice que su gobierno no es de izquierda, ¿por qué yo tendría que calificarlo como tal?
-En este gobierno está Javier Diez Canseco, quien viene justamente desde la izquierda de los años 80…
-El es una oveja negra dentro de la manada, pero qué va a hacer solo… tiene que andar con la bancada de Humala. Pero hasta hora no veo un solo proyecto suyo. De repente en cualquier momento se sale también de Gana Perú.
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